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GLCKSKFR0005
Los niños se sentirán atraídos por las formas y colores de esta preciosa casa de 8 arcos. Creando mini mundos se sumergirán en el juego durante horas, combinándolo con muñecos, figuras o elementos naturales, las posibilidades de juego son infinitas.
Dimensiones: 19 cm x 7 cm x 12 cm
Peso: 520 g
Piezas: 8
Edad: a partir de 3 años
La casita verde con 8 arcos de madera está teñida con pinturas no tóxicas a base de agua que dejan a la vista la veta natural de la madera. La superficie tiene una textura algo rugosa lo que hace a los bloques menos resbaladizos, una ventaja para el desarrollo sensorial pues el niño juega prácticamente en contacto directo con la madera. Las piezas encajan entre sí, en una sucesión de diferentes tonalidades de colores verdes y amarillos que pueden dar lugar a múltiples formas y construcciones. Es un juguete afín a la pedagogía Waldorf.
Características del juguete:
Dimensiones: 19 cm x 7 cm x 12 cm
Peso: 520 g
Piezas: 8
Edad: a partir de 3 años
Los juegos de construcción son uno de los juguetes más básicos para los niños. Los niños más pequeños construyen torres, tiran los bloques, llenan cualquier recipiente con ellos y los vacían otra vez. Hacia los 3 años comienza el juego imaginativo, el niño construye sus mundos de ficción, una casa, un bosque, un árbol. Los bloques de construcción desarrollan diferentes habilidades; la espacial, el equilibrio, la coordinación óculo-manual. Potencian el orden y la concentración, pero a su vez el niño constata que puede cambiar la apariencia de las cosas, por lo que aprende a desenvolverse en autonomía a la vez que se hace más independiente.
SOBRE GLÜCKSKÄFER
Desde su fundación Glückskäfer tiene como logo una mariquita en un trébol de cuatro hojas, la felicidad que transmite ese trébol es la filosofía que la empresa ha tenido siempre. Llevar la felicidad a los niños por medio de juguetes que fomentan el juego libre y su desarrollo integral. A lo largo de los años, la empresa ha logrado establecerse como fabricante de juguetes infantiles de alta calidad y pedagógicamente significativos. Sin haber perdido su filosofía Glückskäfer pertenece hoy a Nictoys que adquirió la empresa en 2011.