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CASA AMARILLA de MADERA a DOS AGUAS de GLÜKCSKÄFER Ver más grande

CASA AMARILLA de MADERA a DOS AGUAS de GLÜKCSKÄFER

GLCKSKFR0004

Castita de madera hecha con arcos irregulares, nos fascinan su color y sus formas. Para jugar libremente, soñar, imaginar, inventar. Con un juguete así todo es posible; apilar, construir, encajar… y crear pequeños mundos.

Dimensiones: 18 cm x 7 cm x 15 cm

Peso: 674 g

Piezas: 9

Edad: a partir de 3 años

35,95 €impuestos inc.

Casita con 9 arcos de madera teñidos con pinturas no tóxicas a base de agua que dejan a la vista la veta natural de la madera. La superficie tiene una textura algo rugosa lo que hace a los bloques menos resbaladizos, una ventaja para el desarrollo sensorial pues el niño juega prácticamente en contacto directo con la madera. Las piezas encajan entre sí, en una sucesión de diferentes tonalidades de colores cálidos que pueden dar lugar a múltiples formas y construcciones. Es un juguete afín a la pedagogía Waldorf.

Características del juguete:

Dimensiones: 18 cm x 7 cm x 15 cm

Peso: 674 g

Piezas: 9

Edad: a partir de 3 años

El juego desestructurado permite a los niños jugar marcando sus propias reglas, no hay instrucciones, un objeto puede ser cualquier cosa, para pasar a ser otra más tarde. Mezclar diferentes objetos de juego, piezas, elementos naturales, todo es posible.

Los objetos del juego desestructurado evolucionan con el niño, que juega con ellos según su desarrollo, su propio ritmo evolutivo. Poder explorar diferentes formas de juego, tocar, manipular, buscar sus propias creaciones y soluciones, favorece su propia independencia, la capacidad de tomar decisiones, ensayar el error, rectificar. En definitiva el juego desestructurado aporta al niño habilidades para su desarrollo emocional.

SOBRE GLÜCKSKÄFER

Desde su fundación Glückskäfer tiene como logo una mariquita en un trébol de cuatro hojas, la felicidad que transmite ese trébol es la filosofía que la empresa ha tenido siempre. Llevar la felicidad a los niños por medio de juguetes que fomentan el juego libre y su desarrollo integral. A lo largo de los años, la empresa ha logrado establecerse como fabricante de juguetes infantiles de alta calidad y pedagógicamente significativos. Sin haber perdido su filosofía Glückskäfer pertenece hoy a Nictoys que adquirió la empresa en 2011.

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